Dom. Ago 3rd, 2025

Licencias médicas falsas: síntoma de un sistema que enferma y luego castiga al enfermo

Jul 15, 2025

La Policía de Investigaciones (PDI) desarticuló una red integrada por más de 60 médicos y médicas, acusada de emitir más de 71.000 licencias médicas falsas entre 2020 y 2023, provocando un perjuicio fiscal estimado en $26.000 millones de pesos. Las licencias eran ofrecidas en redes sociales y grupos de WhatsApp, con precios que iban desde los $20.000 a los $60.000, sin diagnóstico ni evaluación clínica.

Las reacciones oficiales no se hicieron esperar: el Ministerio Público anunció querellas por fraude al Fisco, asociación ilícita y ejercicio ilegal de la medicina, mientras los medios hegemónicos amplifican el discurso de “tolerancia cero” y llaman a endurecer los controles. Pero ¿quién controla a los verdaderos responsables de enfermar al pueblo trabajador?

Cuando el sistema enferma: trabajar hasta romperse y luego mendigar el descanso

ESin embargo, ete caso no puede limitarse a la condena de médicos y pacientes “irresponsables”. Lo que se revela aquí es la crisis estructural de un modelo laboral y sanitario neoliberal, en el que:

  • El cuerpo humano es una máquina que sólo sirve si produce,
  • El descanso es una excepción que debe justificarse,
  • Y la salud mental, la fatiga crónica o el estrés laboral no son razones válidas para detenerse.

El mercado de la salud: todo se vende, hasta la licencia

El sistema chileno no protege la salud: la comercializa. ¿Cómo se genera este mercado negro?

  • Porque las mutuales niegan enfermedades laborales,
  • Porque las ISAPRES rechazan licencias o pagan con meses de retraso,
  • Porque los médicos de consultorio no tienen tiempo para evaluar clínicamente a nadie,
  • Y porque el sistema castiga al que descansa más de lo que resulta rentable para el capital.

Frente a este colapso, la licencia falsa es la respuesta desesperada de quien no puede más. No es turismo: es supervivencia.

El verdadero fraude: el sistema de salud precarizado, y el trabajo que enferma sin protección

¿Querellas contra médicos? Correcto. Pero, ¿dónde están las querellas contra los empleadores que no respetan pausas ni las licencias? ¡donde las querellas contra las empresas que explotan con contratos ilegales o “a honorarios”?¡donde las querellas contra las ISAPRES que persiguen a los médicos que “dan muchas licencias”?

Ahí está el fraude mayor, legal, sistemático y normalizado.

Conclusión: una sociedad que mercantiliza el descanso no puede hablar de ética

Este caso no se trata solo de licencias falsas, sino de un sistema falso. Falsa es su promesa de salud como derech universal. Falsa es su idea de bienestar. Falsa es su moral que condena al enfermo y protege al patrón.

La licencia médica debería ser un derecho. No un privilegio, ni un objeto de mercado.

Y como dijo Marx:

“En la sociedad capitalista, el obrero sólo tiene valor cuando funciona. Cuando se rompe, se convierte en residuo.”

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